Davinia (La Línea, 1985) irrumpió en el panorama nacional al son de la vorágine de Operación Triunfo (OT). Con 18 años triunfó quedando cuarta en la tercera edición del concurso de música de mayor éxito de la historia de España. Ahora, a los 31 años y con una niña de cuatro en el mundo, Anabella, vuelve a sonar en las radios con su cuarto álbum: Casita de muñecas.
Hablar con usted sin mencionar Operación Triunfo es imposible, cuando se cumplen 15 años de la primera edición ¿Qué recuerdos tiene de esa época?
Cuando entre en la academia me di a conocer al publico general. Fue mi trampolín. El recuerdo es buenísimo, fue una experiencia inolvidable y muy enriquecedora. Creo que para cualquier cantante que te den la oportunidad de entrar allí con los grandísimos profesionales que había, y estar cuatro meses trabajando... me abrió bastantes puertas y por ahora no he notado tampoco que se me haya cerrado ninguna, tengo muy buen recuerdo, lo recuerdo con mucha nostalgia y ahora reviviéndolo otra vez con el aniversario de la primera promoción.

Concierto de Davinia / © Davinia
¿Que queda de aquella joven que irrumpió en OT?
De aquella joven queda la ilusión y las ganas, pues nunca se debe de perder, y seguir aprendiendo porque todo empezó muy joven con 18 años y vino todo de muy repente, me encontré de cantar en concursos como hobby a encontrármelo como mi profesión, vinieron los 3 discos muy seguidos, y llego un momento en el que tuve que parar para poder buscar sonidos con los cuales me sentía identificada, para poder madurar y encontrar el tipo de música en el cual quiero continuar mi carrera.
"Es difícil sentirse profeta en la tierra y yo lo sentí y lo siento"
A nivel personal tras estos años he evolucionado personalmente investigando nuevos ritmos y sonidos, que es lo que nos ha llevado a esa Casita de Muñecas.
¿Te ha afectado el éxito?
No el éxito no me ha afectado para nada, cuando salí OT, me fui de La Línea siendo una persona anónima, y cuando vine me encontré un día que fui a comprarme unos tenis con mi padre, y para cruzar la calle real tarde una hora y media, pero lo llevo muy bien, porque al fin y al cabo es de lo que te alimentas para seguir y cuando ves el cariño de las personas es lo que te da fuerzas.

Davinia / © Davinia
Has estado apartada de la música durante unos años, ¿no?
Sí, he estado un año fuera. Yo lo necesitaba porque tenía que desarrollarme como persona, crecer, madurar y volver a coger fuerzas y energías para llegar a esto. Hemos vuelto con energía y con toda la ilusión renovadas.
Y después de tanto vivido, se ha quedado en La Línea...
La Línea yo siempre la he llevado a las galas, desde que entre en el concurso, siempre me ha gustado decir que soy de aquí, yo siempre digo que "es difícil sentirte profeta en tu tierra" y yo lo sentí, recuerdo que en uno de los casting que me hicieron dije que la ilusión más grande sería cantar en el estadio municipal de la línea, y ese sueño se cumplió, de hecho creo recordar que fueron 25.000 personas. Yo tuve la oportunidad de irme a vivir y trabajar fuera de aquí en su momento, pero no me puedo despegar de aquí, aunque me he tirado mucho tiempo fuera trabajando, pero el olor a mar me lo pide estar aquí.

Cover de Casas de Muñecas del Disco de Davinia / © Davinia
¿Que ha sido para usted, su cuarto disco
Este disco, de los cuatro, es en el que más implicada he estado desde el principio hasta el fin, empezamos a trabajar con la música de Chico Valdivia y con las letras de la escritora Emy Luna, y he tenido la suerte de grabarlo en los estudios de Giller Music , que es de aquí de la Linea, he podido ver desde como se compone una canción, como nacen las melodías e incluso después a la hora de grabar el videoclip he podido estar encima, en la edición de las fotos.
Además de Valdivia al piano, teclados y programación de batería, cuento con Jesús Román para el cajón y la darkuba; José Manuel Posada para el bajo; Juan Carlos Jiménez en la guitarra acústica y eléctrica, excepto en algunas pistas que lo hace Valdivia; Manuel Peralta, a la guitarra flamenca y Faiçal Kourrich, en el violín.
Me siento identificada con todas las canciones, con este disco he encontrado ser Davinia en esencia pues me recuerda mucho a mis inicios, pero con la madured ya adquirida, después de estos años investigando, así creo que Casita de Muñecas os va a gustar mucho.